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FOTÓGRAFO GASTRONÓMICO

¿Qué hay mejor que saborear un plato con la vista?, texturas, brillos, colores…. y es que en realidad comemos con los ojos. Seducir a un comensal y despertar su curiosidad siempre es una tarea difícil aunque tengamos delante la imagen de un gran trabajo culinario, ya que ésta debe poder atrapar la atención mediante todo lujo de detalles;  luz y atmósfera adecuadas , brillos sugerentes, combinación de colores, una perspectiva adecuada para poder ver el plato en su máxima expresión…Por eso la fotografía gastronómica de calidad siempre es el mejor aliado para mostrar cómo es la cocina de un restaurante y qué representa cada ingrediente elegido. 

 

Como fotógrafo gastronómico, mi equipo y yo siempre tratamos de producir imágenes frescas, fotografías que comunican. El uso dedicado de la Luz es indispensable para conseguir cualquier atmósfera y acabado; una especial sensibilidad y experiencia en el manejo de esta se traducen en dar personalidad a un plato o puesta en escena, en evocar su origen e historia.

 

Técnica y arte se mezclan en esta especialidad en la que disfrutamos ya desde hace muchos años: la fotografía de alimentos.

Dado que la fotografía gastronómica o fotografía de alimentación requiere de un cuidado proceso de elaboración y teniendo en cuenta que los productos y elaboraciones se ven alterados por la temperatura y el paso del tiempo, es necesaria una buena organización a la hora de preparar la sesión fotográfica y el orden en que las creaciones serán dispuestas. 

 

Esto hace que en muchas ocasiones y si el presupuesto lo permite trabajemos con estilista culinario (home economist), para obtener un mejor y más rápido resultado que además se suele traducir en ventas de nuestros clientes, ya que estos profesionales tienen una especial sensibilidad y visión comercial  siempre actualizada en este campo. Un home economist además, se encarga de la elección de los mejores productos y de su calidad visual, aportando además de la experiencia y trucos visuales del fotógrafo de alimentos, una serie de efectos especiales muy elaborados para poder dar frescura y autenticidad a los platos.

La contratación de un fotógrafo de alimentación y de su equipo siempre es una apuesta segura para diferenciar un negocio de restauración o de producción de alimentos gracias a un resultado visual de calidad que hace que exista una interacción entre el usuario y la imagen.

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